Por Corinna Acosta.
12 Abril de 2021.
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Palabras clave: Energías limpias, Rezagadas, Proceso lento.
La AIE afirma que, aunque los valores de las renovables aumentan, se necesitan reformas para igualar las condiciones de los inversores.
Los expertos afirman que la reducción de las emisiones mundiales de carbono a cero en 2050 requerirá una nueva inversión de entre 1 y 2 billones de dólares al año para cambiar los edificios, el transporte y la industria por electricidad renovable procedente de la energía eólica, solar e hidráulica.
Corporate Knights hizo mención que afortunadamente, los contribuyentes no tendrán que pagar toda la cuenta. La Agencia Internacional de la Energía —un grupo de reflexión política con sede en París dirigido por los ministros de energía del mundo— afirma que el cambio a cero emisiones de carbono puede ser financiado principalmente por los inversores.
El estudio, elaborado con el Centre for Climate Finance & Investment de la Imperial College Business School de Londres, comparó el rendimiento de las inversiones a cinco y diez años de 545 productores de petróleo, gas natural y carbón de 55 países con una cartera de 208 empresas de energías renovables y equipos de 34 países.
El resultado que se demuestra es:
En las economías avanzadas, la energía renovable ofreció una rentabilidad total a 10 años del 727%, frente a sólo el 31.6% de las empresas de combustibles fósiles.
En los mercados emergentes y en los países en desarrollo, más arriesgados, las empresas de energías renovables siguieron obteniendo una rentabilidad del 136% a diez años, frente al 113.8% de las empresas de combustibles fósiles.
ROI de energías limpias es 700% más alto... pero siguen rezagadas
El estudio también reveló que las carteras de energías renovables se ven menos afectadas por las tendencias generales del mercado que las carteras de combustibles fósiles, una buena señal para los inversores que buscan diversificación.
En general, su análisis demuestra un perfil de riesgo y rentabilidad superior para las energías renovables tanto en condiciones normales de mercado como en medio de los últimos acontecimientos
Los autores esperan que sus conclusiones animen a los inversores y a los responsables políticos a lograr impulsar la demanda de proyectos renovables, en la confianza de que la revolución de las tecnologías limpias está en marcha.
El director ejecutivo del CCFI, Charles Donovan, señaló que no hay nada nuevo en el rendimiento positivo de los valores de las energías renovables: sólo hace falta que los responsables políticos presten atención.
Se afirma que sigue siendo la misma historia desde hace más de una década, y sin embargo la inversión total sigue estando rezagada.
"Los reguladores nacionales, especialmente en Estados Unidos, deben ponerse a trabajar en las reformas necesarias para igualar las condiciones de los inversores en energías limpias"
Afirmó Charles Donovan quien es el director ejecutivo del CCFI.
Tim Gould, funcionario de la AIE, también señaló que mostrar el peso de las inversiones en energías limpias es un paso importante para movilizar el capital internacional.
Pero aún queda mucho por hacer para vincular las fuentes de financiación sostenible con las áreas más necesitadas, especialmente en los mercados emergentes y las economías en desarrollo.
ROI de energías limpias
Las noticias son buenas: a lo largo de 10 años, la cartera de 105 empresas de combustibles fósiles de China ofreció a los inversores una rentabilidad del 41.1%, mientras que sus 74 empresas de energía renovable ofrecieron una rentabilidad del 243%.
Los autores admiten que su informe sólo araña la superficie del sector de las energías limpias; el 90% de la energía limpia es producida por organizaciones que no cotizan en bolsa o por empresas diversificadas que no son principalmente productoras de energía.
Como ya anteriormente había mencionado en otra reseña acerca de las energías renovables, considero que estamos prácticamente en mora de ir ya modernizando nuestras fuentes de energía, reemplazarlas por unas más amigables con el ambiente pero aún así no hago a un lado la otra cara de la moneda que se constata en este informe y es que al pasar de una energía a otra se necesitaría una inversión mucho mayor para reestructurar la energía como en edificaciones por ejemplo, pero sin duda sería un costo elevado que valdría bastante la pena asumir, porque será un avance para nosotros y en especial haríamos un gran favor al ambiente.
Para concluir, estamos en el siglo tecnológico como lo definen algunos así que debemos ponernos pilas con reemplazar varios comportamientos tan dañinos para el ambiente que seguimos llevando a cabo.